Nacida en Caracas en 1967, María Corina Machado se formó como ingeniera industrial antes de convertirse en una de las voces más firmes de la oposición venezolana. Este viernes 10 de octubre le fue otorgado el Premio Nobel de la Paz.
El Comité Noruego del Nobel destacó su “incansable” defensa de la democracia frente al “brutal” gobierno de Nicolás Maduro. A través de las redes sociales circula un emotivo video donde Machado es informada oficialmente sobre el anuncio, minutos antes de que se haga público.
Desafió de frente a Nicolás Maduro y al expresidente Hugo Chávez
Desde los primeros años de su carrera pública, María Corina se propuso defender los valores democráticos y denunciar los abusos del poder, en una Venezuela marcada por la polarización y la crisis institucional.
Su liderazgo político se consolidó en 2010, cuando fue elegida diputada a la Asamblea Nacional tras obtener la mayor cantidad de votos en su circunscripción. Desde entonces, Machado se convirtió en una de las figuras más emblemáticas de la oposición al chavismo.
Su discurso directo y su postura inquebrantable frente al régimen le han costado persecuciones, amenazas y censura.
En 2013 fundó el movimiento Vente Venezuela, una organización de orientación liberal que promueve la economía de mercado, la libertad individual y el respeto a los derechos humanos. Desde ese espacio, impulsó un discurso político que desafió tanto a Nicolás Maduro como a la estructura autoritaria heredada del expresidente Hugo Chávez.

Su histórica confrontación con Hugo Chávez
Uno de los momentos más recordados de su carrera ocurrió en 2012, durante una sesión de la Asamblea Nacional, cuando enfrentó directamente a Hugo Chávez. Con voz firme, le dijo: “Expropiar es robar”.
Aquella frase quedó grabada en la memoria colectiva como un acto de valentía política y marcó el inicio de su persecución por parte del chavismo.
A partir de entonces, Machado fue acusada de conspiración, se le retiró su investidura parlamentaria y fue inhabilitada para ejercer cargos públicos. Pese a ello, continuó denunciando violaciones a los derechos humanos y la corrupción estatal, ganándose el apoyo de miles de venezolanos dentro y fuera del país.
Perseguida y reconocida internacionalmente
En 2024, Machado fue descalificada por el Consejo Nacional Electoral para competir en las elecciones presidenciales, bajo el argumento de supuestas irregularidades administrativas.
En su lugar, el diplomático Edmundo González Urrutia asumió la candidatura de la oposición, pero tras unos comicios cuestionados por fraude, fue forzado al exilio.
Machado, mientras tanto, pasó a la clandestinidad ante amenazas directas a su seguridad. Pese a ello, continuó comunicándose con sus seguidores y denunciando abusos a través de plataformas digitales y aliados internacionales.

Su resistencia y compromiso con la libertad fueron reconocidos por el Comité Nobel noruego, que le otorgó el Premio Nobel de la Paz 2025, destacándola como “uno de los ejemplos más extraordinarios del coraje civil en América Latina en tiempos recientes”.
Con este galardón, se convirtió en la primera venezolana en recibir dicho reconocimiento.
Tras conocer la noticia, Machado expresó brevemente: “Estoy en shock”. Pese a su situación de clandestinidad, se espera que viaje a Oslo para recibir el premio, aunque las autoridades noruegas han indicado que primero deben resolverse asuntos de seguridad antes de su desplazamiento.
María Corina Machado representa hoy una de las figuras políticas más influyentes de América Latina, símbolo de la lucha por la democracia en tiempos de represión.




